El lenguaje de las abejas de la miel (Apis mellifera) es uno de los comportamientos más fascinantes del mundo animal. La danza es el sistema de comunicación animal que tienen las abejas obreras para trasmitirle a sus pares, la distancia y dirección de la fuente de alimento (flores), de donde pueden obtener el néctar y polen necesario para la producción de la miel. Fue Karl R. von Frisch quien estudió y descubrió el mecanismo,después de varios años estudiando a estos insectos - y tras escabullirse de los nazis - descifró el mensaje de su danza comunicativa. Finalmente, en 1973 recibió el premio Nobel de Medicina por este descubrimiento. Aristóteles describe esta conducta en Historia Animalium en el 330 adC.Desde entonces muchos científicos han seguido sus pasos y recientemente un equipo de investigadores de la Universidad Libre de Berlín ha conseguido comunicarse con algunas abejas gracias a un robot, imitando los movimientos y las "danzas" que realizan para enviar sus mensajes.
La danza de las abejas es el sistema por el que dentro de la colmena una abeja pecoreadora transmite a sus compañeras, la información del posicionamiento, la distancia y dirección de la fuente de alimento (néctar y polen de las flores). Para transmitir dicha información las abejas recurren a una serie de desplazamientos y movimientos, que sus compañeras observan e interpretan.Esta danza que explicamos de manera sencilla se lleva a cabo en la oscuridad de la colmena, sobre panales que penden o cuelgan verticalmente.
El número de giros y la dirección hacia la que apunte la abeja indican a las otras abejas exactamente adónde dirigirse. Además la rapidez del baile significa si la fuente de alimentos es muy abundante. La Danza de la Abeja, o la danza-meneo de la cola, se realiza cuando las abejas se alimentan en lugares que están a más de 150 metros de distancia de la colmena. La orientación de la abeja bailarina durante la porción recta de su baile (carrera) indica la ubicación de la fuente de alimento en relación con el sol. El ángulo que adopta la abeja, con relación a la vertical, representa el ángulo de las flores respecto a la dirección en la que está el sol fuera de la colmena. En otras palabras, la abeja al bailar transpone el ángulo solar en el ángulo gravitacional. De esta manera es cómo se comunican las abejas: a través de una danza compleja.
“Si la abeja desapareciera de la superficie del globo, al hombre sólo le quedarían cuatro años de vida: sin abejas, no hay polinización, ni hierba, ni animales, ni hombres”
― Albert Einstein