MANUEL IBARRA SANTOS
El grito de desgarrador de dolor que lanzó la semana pasada la señora Virginia de la Cruz por la desaparición y muerte de su hijo de 21 años, conmocionó la conciencia nacional, concitó los más extraordinarios niveles de solidaridad (social y mediática), movió las fibras del más profundo dolor colectivo y visibilizó la dimensión enorme del atroz delito de desaparición forzada de personas, que en los últimos 6 años alcanzó la cifra nacional de más de 50 mil víctimas.
La exposición del dramático caso de la señora Virginia produjo en el país dolor, enojo, impotencia, angustia y lágrimas, incluso en los más avezados periodistas y conductores de noticieros nacionales, los que, en un fenómeno comunicacional inédito, colocaron a Zacatecas, una vez más, en el epicentro de la narrativa de las notas policiacas y de color “rojo”.
El impresionante grito desgarrador lanzado por una madre adolorida por la muerte de su hijo, que taladró los laberintos negros y profundos de la impunidad y la insensibilidad pública, caló hondo y cuestionó también todas las estructuras sociales y políticas del poder, ante la inacción frente a la comisión de un delito tan atroz que destruye a familias enteras y los cimientos de una sociedad desgarrada y adolorida por la violencia, como la zacatecana.
En Zacatecas, según datos oficiales, se reporta un acumulado histórico de más de 4 mil casos de víctimas de este delito, sin considerar los sub/registros y la cifra negra delictiva, debido a que muchas familias de afectados no acuden a la denuncia por temor a las represalias de los grupos criminales.
Sobre los trabajos de actuación judicial frente a la desaparición forzada de personas en México y Zacatecas, hay nulos resultados y todos los casos quedan en los espacios de la impunidad y la opacidad. Se ha impuesto el fantasma del miedo.
Claudio Lomnitz, miembro del Colegio Nacional y profesor de la Universidad de Columbia (Nueva York), es tal vez el académico que más ha investigado el tema de desaparición forzada de personas y en su documental Zacatecas “Antropología de la Zona del Silencio”, aporta datos interesantes de gran valía para entender el problema. Mencionemos algunos de ellos:
1).-La desaparición forzada de personas en Zacatecas es un fenómeno social y delictivo, relativamente reciente, que se detona en el 2007, ante la lucha de grupos criminales por el control del territorio y la diversificación de los negocios de la economía ilícita.
2).-El delito de desaparición forzada es el único que mantiene un nivel de impunidad del 100%. Poco o nada se ha hecho para combatirlo con estrategias efectivas.
3).- La desaparición forzada (dice Lomnitz) es una modalidad de secuestro, cuyo objetivo, es el reclutamiento de soldados al crimen, contar con obreros, sicarios, sexo/servidoras y trabajadores especializados. El asesinato y exterminio, lo utilizan como medio de purga, ajuste y amedrentamiento ante los grupos rivales.
4).-La “no guerra entre el Estado y el narco” -afirma el investigador-, ha creado un entorno social que favorece la comisión de este delito y en los últimos tres años ha alcanzado niveles de crisis alarmante.
5).-La desaparición de personas se inscribe en una estrategia de corte militar del crimen para reclutar “soldados” que sirvan en los más diversos negocios de la economía de la violencia.
6).-La impunidad y la complicidad es un terreno que mucho ha hecho florecer este delito horrendo y atroz.
VIRGINIA Y LA ZONA DEL SILENCIO:
El grito desgarrador de la Señora Virginia de la Cruz, en demanda de justicia por la desaparición y muerte de su hijo, rompió con todos los parámetros de la llamada “Zona del Silencio” y ha visibilizado la magnitud enorme del delito de desaparición forzada, cobijado por el manto de la impunidad.
El hijo de la señora Virginia desapareció y fue ejecutado en el mes de noviembre del 2023 y su cuerpo depositado en los servicios médicos forenses (SEMEFO), en donde estuvo por ocho meses, sin que se informara a su madre, aun cuando ella había hecho la denuncia oportuna.
El grito estremecedor de la señora Virginia hoy visibiliza la lucha de las madres buscadoras y crea conciencia sobre este horrendo fenómeno.