Este viernes, como parte de un gobierno comprometido con la erradicación de la violencia contra las mujeres, acompañamos con convicción a la Secretaría de las Mujeres de Zacatecas en la entrega de apoyos económicos a mujeres víctimas de violencia. En representación del gobernador David Monreal Ávila, tuve el honor de ser testigo de un acto que va mucho más allá de la asistencia: representa un paso firme hacia la reparación del daño, el reconocimiento de derechos y la restitución de la autonomía.
Porque cuando el Estado se hace presente con sensibilidad y justicia, también se vuelve más humano.
Estos apoyos económicos, gestionados desde la política social de la Cuarta Transformación, tienen una profunda dimensión estructural: permiten que las mujeres puedan romper con círculos de violencia, tomar decisiones sobre su vida, y reconstruirse desde su propia dignidad. No se trata solo de entregar un recurso, sino de dar un mensaje claro: no están solas. El Estado está con ustedes.
En Zacatecas, estamos convencidas y convencidos de que no puede haber transformación sin igualdad, ni igualdad sin libertad para vivir sin miedo. Por eso, cada acción que emprendemos desde el servicio público tiene que responder al mandato ético de cerrar brechas, atender urgencias y transformar las causas de la desigualdad.
Nuestra lucha por un Zacatecas más justo y más igualitario se construye también con actos como este: que reparan, que sanan y que empoderan.