Hablar de juventudes en la administración pública es hablar de presente. En Zacatecas, creemos firmemente que la transformación del servicio público pasa por reconocer el papel clave que juegan las y los jóvenes en la vida institucional. Su energía, creatividad y compromiso no son solo deseables, son indispensables para repensar la forma en la que gobernamos, administramos y servimos a la ciudadanía.
Desde la Secretaría de Administración creemos en abrir espacios a nuevas generaciones, a través de procesos de reclutamiento más incluyentes, programas de servicio social y prácticas profesionales, así como estrategias de formación continua que permitan que más jóvenes encuentren en el gobierno una plataforma de desarrollo y no un muro de burocracia, es indispensable establecer este tipo de estrategias que incluyan a las juventudes.
Sabemos que uno de los retos más grandes que enfrentan las juventudes en México es la precariedad laboral. De acuerdo con cifras nacionales, casi 7 de cada 10 jóvenes trabajan en la informalidad, sin acceso a derechos laborales ni seguridad social. Este panorama nos interpela como instituciones públicas: no podemos ser indiferentes ni replicar esas lógicas. Nuestra obligación es dignificar el trabajo, ofrecer condiciones justas y abrir puertas con perspectiva de futuro.
Además, reconocemos que las juventudes traen consigo nuevas formas de pensar y hacer las cosas. Sus saberes digitales, su conciencia social y su capacidad para innovar representan una oportunidad invaluable para modernizar los servicios públicos, fortalecer la transparencia y acercar al gobierno a la ciudadanía. Cada joven que se integra a la administración pública contribuye a renovar no solo los equipos de trabajo, sino también la visión institucional que guía nuestras decisiones.
Desde Zacatecas, hemos comprobado que cuando se brindan oportunidades reales, las y los jóvenes responden con responsabilidad, creatividad y compromiso. Son ellos quienes, desde áreas administrativas, técnicas y operativas, están proponiendo soluciones, mejorando procesos y poniendo al centro el interés público. No se trata solo de sumar juventudes por cumplir una cuota: se trata de reconocer su capacidad transformadora y abrirles paso en todos los niveles de la toma de decisiones.
Por eso, desde la Secretaría de Administración refrendamos nuestro compromiso de seguir generando espacios que impulsen el talento joven, con condiciones laborales dignas, capacitación constante y rutas claras de crecimiento dentro del servicio público. Creemos en una administración moderna, ética y humana, donde las juventudes no sólo tengan un lugar, sino la posibilidad real de liderar, proponer y transformar. Ese es el Zacatecas que estamos construyendo juntas y juntos, todos los días.
Porque sí: la administración pública también es juventud. Y en Zacatecas, la juventud también gobierna.