Una de las atenciones que ha atraído la curiosidad, el morbo o bien el estudio tanto de escritores, historiadores, cineastas y hasta cómicos, es la mirada a las personas que manifiestas conductas antisociales, violentas y delictivas, por todo lo que se entreteje en torno a dichas conductas, y obviamente esto no es tan nuevo o que obedezca en particular a una época de nuestra historia, y desde la antigüedad ya se trataba de explicar que los delincuentes eran seres poseídos e influidos por las fuerzas oscuras o bien que era un mal divino por karmas de vidas pasadas o designio del destino, ya en nuestros días y de acuerdo a ciertas teorías criminológicas, se toma como una tendencia de ciertas personas a adaptarse tanto en el entorno físico como social para mejorar su supervivencia frente a las dificultades ambientales.

Según algunas explicaciones de diversos escritores entre ellos José Ingenieros, quien asentó que el delito era producto de las asimetrías entre los hombres, y asimilaba la idea socialista de la lucha de clases, centrando su idea en el estudio de las causas que determinan la aparición de las conductas antisociales, delictivas y violentas, como un fenómeno social, es decir los caracteres tanto físico como psíquicos del delincuente en relación con sus actos delictivos y lo que el autor denomino como “profilaxis en la salud pública”; y es aquí donde tiene su entrada sideral la criminología, que de acuerdo con su objeto de estudio es el delito, el delincuente, la víctima, el victimario y el control social, y ha tratado de explicar la conducta antisocial, delictiva y violenta de las personas, basada en estudios de diversas teorías y disciplinas, que solo por mencionar algunas como las teorías de la educación, el desarrollo, el aprendizaje, y las diferencias sociales, aunque igual hay que asentar que hay un segmento delictivo que no responde del todo a factores exógenos en el origen de sus conductas antisociales, delictivas y violentas, sino que existen para ellos un predominio de orden endógeno.

De acuerdo a lo antes expuesto trataremos de asentar de manera breve cuales son esos factores, como se identifican y que características posen los delincuentes violentos; y entrando en materia uno de los factores que sin duda influyen e incitan a las personas a cometer actos ilícitos es la violencia, la cual es ejercida sobre la voluntad de una o varias personas, utilizando fuerzas materiales, o bien mediante amedrentamiento, y en algunos casos las victimas pueden sufrir desde problemas psicológicos que bien pueden durar toda la vida o prolongarse por un buen tiempo según sea la significación del daño causado, e invariablemente mucho tendrá que ver la atención psicológica que se le dé a la víctima; ahora bien adentrándonos un poco en los tipos de violencia que son de manera general las carencias tanto de aptitudes, actitudes o herramientas adaptadas a las personas para satisfacer sus necesidades de socialización, pues de alguna manera es lo que los impulsa a alcanzar sus objetivos de manera violenta.

Ahora bien desmenuzando los conceptos en primer lugar vemos que la agresión cumple una función adaptativa que facilita el ajuste social de los delincuentes, pues hay conductas y actitudes agresivas exhibidas con el objeto de dañar, injuriar y por ende ganar ventaja sobre otra u otras personas sin que necesariamente se cause daño físico, por su lado la violencia es una sub categoría de la agresión activa y directa, física o generalmente psicológica, que tiene lugar en los intercambios entre dichos individuos, por su parte la delincuencia violenta implica directamente comportamientos prohibidos por la ley, y el fin principal de la acción delictiva es lograr dañar de una u otra forma a la víctima, y en todo lo anterior según los estudios de la criminología moderna las posibles causas de la violencia pueden encontrar su explicación tanto en causas biológicas encaminadas al déficit de atención, trastornos hormonales, la debilidad mental, la edad, o el sexo, mientras que algunas de las psicológicas se dan entorno a trastornos mentales o frustración, mientras que las sociales pueden ser la tensión social, la situación económica o las vinculadas con el consumo de alcohol o drogas. Por lo antes expuesto la importancia que reviste en principio de cuentas saber tanto de los factores como de las causas para poder dilucidar de manera adecuada la intervención criminológica y claro esta para el caso que nos ocupa el que la sociedad tengamos una cultura más amplia del tema orientados a la prevención.